Dentro de apenas unos días, la presencia masiva de mascarillas tanto en las calles como en los interiores pasará a la historia. Después de que se eliminase su obligatoriedad en el exterior, el pasado 10 de febrero, el Gobierno prevé publicar esta semana en el Boletín Oficial de Estado el decaimiento de la orden que las mantenía de puertas para adentro. Los neumólogos se han apresurado a indicar que la retirada es prematura, sobre todo para los pacientes respiratorios y los mayores. Estos, que han pasado dos años de miedo y precauciones estrictas, se preguntan qué deben hacer ante la nueva situación.

La retirada de las mascarillas se extenderá a todos los espacios exteriores e interiores, a excepción del transporte público y de localizaciones consideradas especiales como centros de salud o de atención a la tercera edad. En las últimas semanas, el relajamiento en el uso de cubrebocas ya se ha percibido entre la población, y el número de casos de coronavirus ha ascendido en consecuencia. El decaimiento de esta norma coincide con situaciones totalmente contrarias que se viven, por ejemplo, en China, onde centenares de miles de personas se encuentran de nuevo en cuarentena debido a nuevos brotes y en virtud de la política de “covid cero” que mantienen las autoridades.

La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) emitió la pasada semana un comunicado de prensa reclamando al Gobierno que mantenga la obligatoriedad de uso de las mascarillas para aquellas personas que padezcan cualquier tipo de síntoma respiratorio. Para los neumólogos, todavía existe un “riesgo epidemiológico elevado” a causa del SARS-CoV-2 y de las posibles variantes del virus que están por aparecer.

También la Organización Mundial de la Salud ha solicitado a los países en los que el proceso de vacunación está más avanzado que no bajen la guardia, pues el coronavirus mantiene el estatus de pandemia y se está lejos de acabar con el problema a nivel mundial. “Tenemos que estar preparados para la posibilidad de que este virus cambie tanto que ponga a prueba la inmunidad existente”, afirmó la científica jefa de la OMS, Soumya Swaminathan, esta pasada semana.

Por ello, y de acuerdo con las recomendaciones de Separ, Alfa-1 España pide a sus asociados y a todas las personas con patologías respiratorias crónicas que sigan extremando las medidas de precaución. En consecuencia, estas personas deberían usar siempre cubrebocas en interiores. En el exterior, es deseable utilizarlo en cualquier situación de riesgo, como aglomeraciones o en cualquier lugar que consideren mal ventilado.

También sería conveniente que las personas que no padezcan enfermedad pulmonar sean especialmente estrictas en el uso de mascarillas en aquellos espacios en los que, por el momento, seguirán siendo obligatorias. Farmacias, hospitales, centros de salud o residencias de la tercera edad son frecuentadas por personas con problemas respiratorios graves. Cuidar de su salud es un deber ciudadano.